De doce subastas electrónicas, siete fueron negativas. Hoy
la leche en polvo también retrocedió uno por ciento y quedó en 3.189 pesos por
tonelada.
Por Elida Thiery – Este martes en el evento 214 del Global
Dairy Trade, los lácteos volvieron a retroceder por séptima vez en el año. Fue
en el primer mes del año que las ganancias marcaron un balance que aún sigue
siendo positivo, si se tiene en cuenta que el alza al momento acumula 17,6 por
ciento y las bajas suman -6,5 puntos porcentuales.
De todos modos, aunque haya al momento 11,1 por ciento en
positivo en estos seis meses del año, el mensaje del mercado sigue siendo el de
la estabilidad en valores muy bajos, desde diciembre de 2016, luego de aquellas
bajas históricas y demasiado lejos del pico general de abril de 2013.
En particular, las subas fueron dos. La manteca trepó 0,8
por ciento hasta 5.611 dólares la tonelada; y con 8,2 puntos, la lactosa se
valuó en 769 dólares por unidad de medida. Mientras que no hubo oferta de suero
dulce en polvo, ni de manteca en polvo, las bajas se acumularon en la grasa
anhídrida (-2,5%, U$S 6.060), queso cheddar (-3,6%, U$S 3.847), la caseína
(-2,2%, U$S 4.898); y la leche descremada en polvo (-1,1%, 2.003).
La leche entera en polvo no eludió la tendencia y cayó uno
por ciento hasta 3.189 dólares, manteniendo la tensión al borde del precio de
piso que se entiende que debe tener y muy lejos de aquellos 5.208 dólares por
tonelada, de aquel primer día de octubre de 2013.
Leyendo las tendencias de las materias primas a nivel global,
todas y en especial los alimentos treparon de manera importante al inicio de
2018, pero ahora se estabilizan y podrían permanecer de esa manera a lo largo
del año, con mucha expectativa en el clima a nivel global para poder seguir
sosteniendo la provisión de materias primas como hasta el momento.
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