Resulta ser que tal como se sucede la vida en los medios de comunicación, totalmente regida por Gran Hermano y su irrupción directa hasta en los programas de la competencia, esta semana el tema a debatir es la "nominación espontánea" que Marianela le hizo a Diego y que en definitiva lo dejó fuera de competencia.
Este chico al que comenzó discriminándolo por ser un ex-presidiario, a pesar de tener la clara intención de recomponer su vida y habiendo cumplido la condena indicada, la señorita de clase media alta que fue atacada y protegida por él mismo terminó dándole una estocada demoledora que podría definirse concretamente como "traición".
Lo llamativo del caso, más allá del cambio en la mirada y en la actitud de la dama, es la catarata de críticas que esto genera. O yo estoy equivocada, o la traición está en todas partes?. Desde la madre que le dice a su hijo que coma una cucharada más de puré y le da cinco, encubriendo un engaño piadoso, hasta el político que se queda con los vueltos que no le corresponden, ésta característica de nuestra sociedad pareciera expandirse como epidemia, pero al menos subsiste a la par la capacidad de detectarla como algo errado, aunque se sigue permitiendo y habilitando en cada espacio de interacción. Como en todo, primero lo primero y la crítica personal y reestructuración de valores es la que ante todo se debería considerar.
Este chico al que comenzó discriminándolo por ser un ex-presidiario, a pesar de tener la clara intención de recomponer su vida y habiendo cumplido la condena indicada, la señorita de clase media alta que fue atacada y protegida por él mismo terminó dándole una estocada demoledora que podría definirse concretamente como "traición".
Lo llamativo del caso, más allá del cambio en la mirada y en la actitud de la dama, es la catarata de críticas que esto genera. O yo estoy equivocada, o la traición está en todas partes?. Desde la madre que le dice a su hijo que coma una cucharada más de puré y le da cinco, encubriendo un engaño piadoso, hasta el político que se queda con los vueltos que no le corresponden, ésta característica de nuestra sociedad pareciera expandirse como epidemia, pero al menos subsiste a la par la capacidad de detectarla como algo errado, aunque se sigue permitiendo y habilitando en cada espacio de interacción. Como en todo, primero lo primero y la crítica personal y reestructuración de valores es la que ante todo se debería considerar.
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