El campo no venderá trigo durante la próxima semana

Del 17 al 24 no se comercializará el cereal; y el próximo martes en una asamblea en Bahía Blanca se analizará cómo seguir ante la escasa reacción del Gobierno. Esta pausa en las ventas quitará ingresos al Estado en pleno momento de recaudación.

La Comisión de Enlace Agropecuario anunció ayer por la tarde un cese de comercialización de cereales y oleaginosas por siete días, entre las cero del lunes 17 y la medianoche del domingo 23 próximo, en protesta contra las políticas agrícolas del Gobierno de Cristina Kirchner.
Así lo anunció el titular de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, al leer una declaración conjunta de su entidad, además de Federación Agraria Argentina, Coninagro y Confederaciones Rurales Argentinas.
"En materia de exportación de trigo, los productores queremos cambios en política y no gatopardismo", fue el título elegido por los titulares de las cuatro entidades para el comunicado con el que anunciaron la medida de fuerza.
La protesta fue anunciada pocas horas después que el Gobierno informara que se "liberó la totalidad del saldo exportable de trigo", una decisión que no conformó a la Comisión de Enlace, que ya sabe de este tipo de acciones sobre la hora del Gobierno, que luego no se cumplen y es por eso que avanzaron sobre un reclamo activo.
"Ya conozco lo que piensan ustedes, pero lo que vamos a hacer es esto", le habría dicho el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, a los ruralistas en la reunión concretada durante la mañana del miércoles, según dijo Biolcati.
Los ruralistas mostraron su disconformidad con las medidas dispuestas por la administración kirchnerista y reclamaron en conferencia de prensa la "apertura total de las exportaciones de trigo y maíz y la eliminación de los cupos".
Asimismo, pidieron que sea el Ministerio de Agricultura el que defina las políticas agropecuarias "sin ceder autoridad a otros estamentos", en una crítica directa contra las intervenciones del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
“Vamos a empapelar toda la Costa Atlántica explicando la problemática del trigo; que explique el Gobierno nacional por qué los alimentos están cada vez más caros”, apuntó el presidente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi.
Por su parte, el titular de SRA, Hugo Biolcati, manifestó que “siempre estamos abiertos a una nueva convocatoria al diálogo; veremos qué sucede más adelante pero estamos dispuestos a escuchar cualquier modificación”.
En tanto, el presidente de Coninagro, Carlos Garetto, señaló que “la intervención del Gobierno no ha dejado que se articule el mercado internacional con el local", para luego mencionar que “si dejamos que la molinería compita con la exportación no significa para nada que vaya a aumentar el pan”.
Por último, el titular de Confederaciones Rurales Argentinas, Mario Llambías, dijo que “hace cuatro años había 40 exportadores y hoy siete exportan el 90%; esto quita competencia” entre las distintas empresas.
En tanto, el próximo martes se realizará una asamblea de productores en la ciudad de Bahía Blanca donde se esperan definiciones importantes en cuanto a la evolución de la protesta triguera organizada por las cuatro entidades del sector agropecuario.

RECLAMO
La Comisión de Enlace trata de "presunta" a la liberación de exportaciones de trigo, de la cual surge un análisis minucioso que requiere mencionar, de acuerdo a lo manifestado en el comunicado extendido ayer. Que lo anunciado no resuelve el objetivo solicitado del normal funcionamiento de los mercados trigueros. Que por medio de un pomposo anuncio de apertura del total del saldo exportable del trigo, se esconde la mezquindad de mantener la aplicación de cupos absolutamente funcionales a los grupos concentrados de la molinería y la exportación que hasta el momento han demostrado no tener ninguna disposición a pagar al productor el mejor precio posible (FAS teórico) provocando una transferencia de recursos casi obscena y de carácter millonario, desde el bolsillo de los productores a ganancias garantizadas de estos grupos. Que estas acciones de intervención distorsiva se vienen repitiendo desde hace varias campañas en los últimos años. Que los anuncios de créditos y supuesta apertura de exportaciones son tardíos e insuficientes para muchos productores a la vez de constituir un sistema discrecional y distorsivo, y por lo tanto perjudicial para productores y consumidores. Que los recursos que se concentran en pocas manos no van ni al fisco ni al conjunto de los pueblos del interior por lo que se afecta en definitiva intereses particulares minoritarios. Que se necesitan políticas de mediano y largo plazo para promover una mayor producción con más productores y no este presente que desalienta y concentra la producción poniendo en riesgo el objetivo que se dice perseguir de garantizar la seguridad alimentaria y la mesa de los argentinos.
Por todo lo expuesto, reclaman  la apertura total de las exportaciones de trigo y maíz y eliminación de los cupos y restricciones a la exportación a efectos de lograr la normalización de los mercados, la efectiva puesta en funcionamiento de la Comisión Bicameral de seguimiento de la transferencia de productores hacia las multinacionales, que hace más de dos años espera su conformación, el pago del precio lleno al trigo (FAS teórico) anunciado por le Gobierno nacional en estos últimos días. El Gobierno debe asumir la responsabilidad de indemnizar a los productores que ya tuvieron que vender su trigo a precios injustos, el pago inmediato de las compensaciones de trigo de la campaña 2008-09 hasta 800 toneladas, anunciado por el Gobierno nacional en tiempo y forma. Hay más de 8.000 productores que lo tramitaron y no han cobrado. El cumplimiento de los planes Maíz Plus y Trigo Plus. El reintegro inmediato de las retenciones de IVA (8%). La creación de sistema que ordene y fije pautas soberanas para el comercio exterior de granos, impidiendo la cartelización y las intervenciones distorsivas. Que sea el Ministerio de Agricultura el que defina las políticas agropecuarias nacionales sin ceder facultades que le son propias a otros estamentos de Gobierno. Que el Gobierno nacional instrumente políticas diferenciadas de fortaleza al pequeño y mediano productor, también a través de la segmentación de las retenciones mientras estas se mantengan en vigencia. 

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