Por Elida Thiery (redacción LA OPINION). - En la crónica de la asamblea desarrollada el pasado viernes por la mañana en la Sociedad Rural de Rafaela, se relataba la situación de exclusión que vivieron tres dirigentes de la Mesa Nacional de Productores de Leche. Antes que Caprolec y Meprolsafe firmaran el acta que de manera encubierta convalida una baja en los precios de los tamberos, por la ley de la oferta y demanda que en cada primavera se aplica por lógica; y sostiene un precio por algo así como dos años, mientras la inflación y los costos suben, Julio Aimar, Manuel Ocampo y Máximo Russ, debieron dejar el encuentro.
Los tres dirigentes bonaerenses fueron invitados a que no presencien la segunda mitad del encuentro que se estaba llevando a cabo en la sede del gobierno de Santa Fe. Habiendo avisado de su presencia al Ministro de la Producción y con posterior aprobación del mismo, Carlos Fascendini por intermedio de su secretario solicitó que se retiren. Según los integrantes de la MNPL, "nos resultó una total falta de atributos ministeriales el no poder brindar garantías de un encuentro en paz y democracia en su casa gubernamental y dejarse llevar por una serie de gritos confusos e inentendibles que algunos de los presentes fueron a propiciarse en discusiones realizadas en pasillos, abajo de donde se estaba llevando a cabo la reunión".
Además de habérseles negado previamente la palabra en el encuentro en el cual estaban habilitados a participar, los dirigentes tamberos bonaerenses pudieron presentar ante el Ministerio de la Producción santafesino y el de Agricultura de Córdoba, el acta del 13 de julio celebrada en el Minagri y firmada por todos los representantes de la producción para que sirva de base a las negociaciones que debían llevarse a cabo, "manteniendo la coherencia que caracteriza el accionar de la MNPL con el objetivo de evitar caer, por efecto de la situación de conflicto frente a las usinas que reinaba en ese momento, en acuerdos perjudiciales para los productores como en definitiva resultó por la intolerancia, falta de respeto y ética, puesta de manifiesto por aquellos que luego aceptaron un acta plagada de errores y perjuicios para el sector de la producción", la cual es absolutamente rechazada por la entidad que nuclea a 13 instituciones nacionales, en cada uno de sus términos.
Sabiendo de las consecuencias negativas de la misma, la MNPL considera en un comunicado extendido a este Diario que "ambos ministros presentes en dicha reunión (sin haber firmado Fascendini el documento, aunque oficiara de anfitrión) como aquellos funcionarios dependientes funcionalmente de los anteriores, deberían reflexionar sobre el contenido del acta en cuestión, para no convalidar la misma ante el Ministerio de Agricultura de la Nación", en un acto a realizarse mañana en la Capital Federal.
Los tres dirigentes bonaerenses fueron invitados a que no presencien la segunda mitad del encuentro que se estaba llevando a cabo en la sede del gobierno de Santa Fe. Habiendo avisado de su presencia al Ministro de la Producción y con posterior aprobación del mismo, Carlos Fascendini por intermedio de su secretario solicitó que se retiren. Según los integrantes de la MNPL, "nos resultó una total falta de atributos ministeriales el no poder brindar garantías de un encuentro en paz y democracia en su casa gubernamental y dejarse llevar por una serie de gritos confusos e inentendibles que algunos de los presentes fueron a propiciarse en discusiones realizadas en pasillos, abajo de donde se estaba llevando a cabo la reunión".
Además de habérseles negado previamente la palabra en el encuentro en el cual estaban habilitados a participar, los dirigentes tamberos bonaerenses pudieron presentar ante el Ministerio de la Producción santafesino y el de Agricultura de Córdoba, el acta del 13 de julio celebrada en el Minagri y firmada por todos los representantes de la producción para que sirva de base a las negociaciones que debían llevarse a cabo, "manteniendo la coherencia que caracteriza el accionar de la MNPL con el objetivo de evitar caer, por efecto de la situación de conflicto frente a las usinas que reinaba en ese momento, en acuerdos perjudiciales para los productores como en definitiva resultó por la intolerancia, falta de respeto y ética, puesta de manifiesto por aquellos que luego aceptaron un acta plagada de errores y perjuicios para el sector de la producción", la cual es absolutamente rechazada por la entidad que nuclea a 13 instituciones nacionales, en cada uno de sus términos.
Sabiendo de las consecuencias negativas de la misma, la MNPL considera en un comunicado extendido a este Diario que "ambos ministros presentes en dicha reunión (sin haber firmado Fascendini el documento, aunque oficiara de anfitrión) como aquellos funcionarios dependientes funcionalmente de los anteriores, deberían reflexionar sobre el contenido del acta en cuestión, para no convalidar la misma ante el Ministerio de Agricultura de la Nación", en un acto a realizarse mañana en la Capital Federal.
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