Por Elida Thiery – Tal como lo viene anticipando CASTELLANOS, será hoy a partir de las 10 que en Colegio Don Bosco de Venado Tuerto, al sur de la provincia de Santa Fe se convoquen funcionarios y entidades de la cadena láctea para firmar el convenio de mejora estructural ante la crisis del sector.
Será en un lugar atípico para la lechería, sobre el que hoy seguramente se dará a entender el motivo de generar la firma del acuerdo-marco en el lugar, donde aún no salen de la sorpresa, sobre todo por la presencia del presidente, Mauricio Macri, junto a los ministros de Agroindustria, Ricardo Buryaile, de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, además del Subsecretario de Lechería, Alejandro Sammartino. A ellos se sumarán los representantes de Apymel, el Centro de la Industria Lechera y la Junta Intercooperativa de Productores de Leche, además de las entidades de productores nucleadas en la Mesa Nacional de Productores de Leche, así como Meprolsafe, Caprolec, e incluso la novel Apla.
Como ya vienen leyendo en los últimos días, esta rúbrica conllevará el anuncio de pago de subsidios de 40 centavos por litro (para los primeros tres mil de cada tambo, tomando como parámetro la producción de octubre a diciembre) a pagarse a fin de enero, febrero y marzo. Además, la disponibilidad de mil millones de pesos para créditos con tasa subsidiada para invertir en capital de trabajo; y mejora en la condiciones de las exportaciones para las empresas.
El punto que motivó la demora en la firma será el del aumento de valores para el litro de leche, que deberán cumplir las industrias. En los papeles se detallará en el artículo tercero, "Las cámaras de la industria, en línea con lo fundamentado en el punto anterior (sobre precios promedio de noviembre), también se comprometen a que sus representados realicen el mayor esfuerzo para mejorar el precio pagado al productor por la leche del mes de enero, febrero y marzo de 2016, implementando, de acuerdo con las posibilidades de los mercados, una gradual recomposición de los precios de la leche cruda, que permita asegurar el normal abastecimiento de materia prima por parte de los productores. Aquellas que estuvieron por sobre el promedio ponderado del Centro de la Industria Lechera durante los meses de noviembre y diciembre de 2015, que está en torno a los $ 2,60 por litro, harán el esfuerzo de mejorar dicho valor. Aquellas que estuvieron por debajo de ese promedio ponderado, se comprometen a alcanzar una recuperación de precio de un mínimo del 15% en relación a dicho período de noviembre y diciembre, como valor promedio empresa". Lo que añade el convenio es que todo tendrá vinculación con "el acuerdo de precios que se logre con el sector comercial interno, promoviendo que la mejora en los precios a salida de fábrica no se traslade en forma significativa a los consumidores y permita que se cubran los incrementos de todos los costos". Aquí se deja en claro un futuro encuentro con el eslabón más cuestionado, donde se da la mayor expansión de valores, así como la retención mayor de la renta sobre el precio final, que supera el 31 por ciento.
A partir de esta firma se abrirá la alternativa de recorridos de las cuencas por parte de la Subsecretaría, de acercamiento concreto con los productores, pero también de explicitación y aplicación de políticas a los objetivos de crecimiento, para afrontar el desafío de hacer de los tambos un espacio de resistencia, para la valoración de su función social, frente al avance de la agricultura, que solo se logra con más rentabilidad, con mayores facilidades para la producción y con certezas para quienes todos los días cumplen con la extracción de materia prima, que es donde se inicia el camino de una industria con grandes posibilidades externas y que hace más de una década que parece adormecida por motivos ajenos y bien políticos.
Será en un lugar atípico para la lechería, sobre el que hoy seguramente se dará a entender el motivo de generar la firma del acuerdo-marco en el lugar, donde aún no salen de la sorpresa, sobre todo por la presencia del presidente, Mauricio Macri, junto a los ministros de Agroindustria, Ricardo Buryaile, de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, además del Subsecretario de Lechería, Alejandro Sammartino. A ellos se sumarán los representantes de Apymel, el Centro de la Industria Lechera y la Junta Intercooperativa de Productores de Leche, además de las entidades de productores nucleadas en la Mesa Nacional de Productores de Leche, así como Meprolsafe, Caprolec, e incluso la novel Apla.
Como ya vienen leyendo en los últimos días, esta rúbrica conllevará el anuncio de pago de subsidios de 40 centavos por litro (para los primeros tres mil de cada tambo, tomando como parámetro la producción de octubre a diciembre) a pagarse a fin de enero, febrero y marzo. Además, la disponibilidad de mil millones de pesos para créditos con tasa subsidiada para invertir en capital de trabajo; y mejora en la condiciones de las exportaciones para las empresas.
El punto que motivó la demora en la firma será el del aumento de valores para el litro de leche, que deberán cumplir las industrias. En los papeles se detallará en el artículo tercero, "Las cámaras de la industria, en línea con lo fundamentado en el punto anterior (sobre precios promedio de noviembre), también se comprometen a que sus representados realicen el mayor esfuerzo para mejorar el precio pagado al productor por la leche del mes de enero, febrero y marzo de 2016, implementando, de acuerdo con las posibilidades de los mercados, una gradual recomposición de los precios de la leche cruda, que permita asegurar el normal abastecimiento de materia prima por parte de los productores. Aquellas que estuvieron por sobre el promedio ponderado del Centro de la Industria Lechera durante los meses de noviembre y diciembre de 2015, que está en torno a los $ 2,60 por litro, harán el esfuerzo de mejorar dicho valor. Aquellas que estuvieron por debajo de ese promedio ponderado, se comprometen a alcanzar una recuperación de precio de un mínimo del 15% en relación a dicho período de noviembre y diciembre, como valor promedio empresa". Lo que añade el convenio es que todo tendrá vinculación con "el acuerdo de precios que se logre con el sector comercial interno, promoviendo que la mejora en los precios a salida de fábrica no se traslade en forma significativa a los consumidores y permita que se cubran los incrementos de todos los costos". Aquí se deja en claro un futuro encuentro con el eslabón más cuestionado, donde se da la mayor expansión de valores, así como la retención mayor de la renta sobre el precio final, que supera el 31 por ciento.
A partir de esta firma se abrirá la alternativa de recorridos de las cuencas por parte de la Subsecretaría, de acercamiento concreto con los productores, pero también de explicitación y aplicación de políticas a los objetivos de crecimiento, para afrontar el desafío de hacer de los tambos un espacio de resistencia, para la valoración de su función social, frente al avance de la agricultura, que solo se logra con más rentabilidad, con mayores facilidades para la producción y con certezas para quienes todos los días cumplen con la extracción de materia prima, que es donde se inicia el camino de una industria con grandes posibilidades externas y que hace más de una década que parece adormecida por motivos ajenos y bien políticos.
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