Con un encuentro del FunPel, ayer se conocieron nuevos objetivos y alcances de las acciones de la cadena, para la generación de más y mejores políticas sectoriales.
Por Elida Thiery – Lo que para muchos es algo notorio y en Rafaela suena a cotidiano, ayer en el salón de actos de la Estación Experimental local del INTA, se cumplió con un nuevo encuentro de la Fundación para la Promoción y el Desarrollo de la Cadena Láctea Argentina. Con la presencia de los principales actores del sector, desde Héctor Molfino y Alfredo Curiotti sentados juntos en el auditorio, con dirigentes históricos como Jock Campbell, o los de las instituciones más regionales como Fernando Córdoba de la Mesa de Productores de Leche de Santa Fe, o Pedro Rostagno de la Sociedad Rural de Rafaela, e incluso asesores de la Subsecretaría de Lechería de la Nación, entre los que se incluye a Alejandro Galetto, el encuentro fue introductorio de un nuevo elemento, el Observatorio de la Cadena Láctea.
Con la presentación a nivel general de la FunPel, a cargo del Ing. Miguel Taverna, donde se destacó la visión de poder arribar a "una lechería competitiva, en desarrollo permanente y con sustentabilidad económica, social y ambiental para abastecer a Argentina y el mundo".
A su tiempo, Jorge Giraudo, presentó una herramienta de tracción para el Gobierno Nacional, como es el Observatorio Lácteo, del cual es coordinador.
Con manejo de información y contraposición de datos, se tenderá a contar con un solo canal que se nutra de datos confiables, con claros procesos metodológicos, de visión objetiva, que genere credibilidad y confianza. Sobre datos objetivos, cada parte luego interpretará los mismos, sumando su mirada a cada caso.
"El propósito fundamental es analizar los datos históricos y lo que pasa en la actualidad, para monitorear los errores y corregir la marcha", manifestó el actual funcionario y exgerente de producción primaria y comunicaciones de SanCor, hasta hace unos años.
Se está desarrollando hoy un sitio web del Observatorio, para poder canalizar los datos y si poder tender a la generación de confianza. Todo esto se enfrenta a la realidad de lo que cada parte pretende, al desánimo de la realidad, pero para pasar a tener "verdades crueles" y superar las etapas de "mentiras confortables".
Hay información oficial generada por las industrias, los costos de producción que hoy no tienen única metodología. Entonces con datos concretos se pueden evidenciar falencias en cada eslabón pero que quedarán a disposición de todos en un sitio web.
"El Observatorio va a detallar datos centrales de la lechería", como se estipuló en su creación el 20 de mayo de 2016, en el ámbito de la Subsecretaría de Lechería, con un consejo asesor, que hoy no tiene todavía participación industrial pero sí ya designados a dos participantes de cada una de las cuatro entidades de la Comisión de Enlace, CRA, SRA, FAA y Coninagro, que serán en conjunto quienes bajen los lineamientos de elaboración de información.
Es en este marco la FunPel la responsable de la obtención de datos y su publicación para que el Observatorio funcione concretamente como un espacio neutral por fuera de la cadena formal, pero puede influir su opinión y datos para la promoción de políticas que puedan generar cambios estructurales.
Con nueve puntos clave e desarrollo este espacio permitirá avanzar sobre la lechería mundial, la lechería argentina, la producción primaria en sus aspectos productivos y económicos, la industria láctea, la comercialización, el mercado externo, la cadena de valor y que también incluyan informes y estudios, que se podrán presentar mensualmente.
Si bien ayer se hizo una presentación general, donde también se incluyó un detalle de la forma de analizar la formación de precios, que rescatará técnicamente la constatación de la necesidad de cobro del productor y capacidad de pago de la industria, con un criterio homogeneizado, empleando una metodología de 2008 del INTA, vigente hasta 2012, contemplando 33 modelos productivos, que en su momento no pudo publicar resultados y hoy se retoma por la convicción en cuanto a su efectividad, a cargo de las especialistas Patricia Engler y Laura Gastaldi.
Finalmente, con la exposición de Enrique Cartier del Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos, se avanzó sobre la mirada del reparto de renta sobre los productos finales y una mirada particular sobre la ecuación muy ampliada del IVA, en este sentido. Sin embargo, nos vamos a quedar con una manifestación particular que compartieron tanto Cartier como Giraudo, sobre la cadena comercial. Este punto clave de los valores en la lechería para ambos "no es un actor de la cadena, porque solo influyen el 30 por ciento el total de las ventas de los lácteos". Claramente en los momentos de debate sobre los criterios a aplicar este será uno de los puntos de mayor desacuerdo.
La importancia de FunPel, que fue la que originalmente había planeado una duplicación para la lechería argentina hacia 2020, previo a la debacle entre gobierno y campo de la gestión Ejecutiva anterior, que tenía acuerdo de partes, pero con la ruptura política se desdibujó. Hoy la intención de responsabilizar a este espacio con el Observatorio Lácteo es generar un espacio intermedio entre entidades de la producción y la industria y el Gobierno, pero que debe superar el escollo de los plazos, de concretar ideas, de consensuar y de formalizar una estructura de negocios muy compleja que tiene gran potencialidad nacional, pero que se debilita con el paso del tiempo y de manera constante.
Con la presentación a nivel general de la FunPel, a cargo del Ing. Miguel Taverna, donde se destacó la visión de poder arribar a "una lechería competitiva, en desarrollo permanente y con sustentabilidad económica, social y ambiental para abastecer a Argentina y el mundo".
A su tiempo, Jorge Giraudo, presentó una herramienta de tracción para el Gobierno Nacional, como es el Observatorio Lácteo, del cual es coordinador.
Con manejo de información y contraposición de datos, se tenderá a contar con un solo canal que se nutra de datos confiables, con claros procesos metodológicos, de visión objetiva, que genere credibilidad y confianza. Sobre datos objetivos, cada parte luego interpretará los mismos, sumando su mirada a cada caso.
"El propósito fundamental es analizar los datos históricos y lo que pasa en la actualidad, para monitorear los errores y corregir la marcha", manifestó el actual funcionario y exgerente de producción primaria y comunicaciones de SanCor, hasta hace unos años.
Se está desarrollando hoy un sitio web del Observatorio, para poder canalizar los datos y si poder tender a la generación de confianza. Todo esto se enfrenta a la realidad de lo que cada parte pretende, al desánimo de la realidad, pero para pasar a tener "verdades crueles" y superar las etapas de "mentiras confortables".
Hay información oficial generada por las industrias, los costos de producción que hoy no tienen única metodología. Entonces con datos concretos se pueden evidenciar falencias en cada eslabón pero que quedarán a disposición de todos en un sitio web.
"El Observatorio va a detallar datos centrales de la lechería", como se estipuló en su creación el 20 de mayo de 2016, en el ámbito de la Subsecretaría de Lechería, con un consejo asesor, que hoy no tiene todavía participación industrial pero sí ya designados a dos participantes de cada una de las cuatro entidades de la Comisión de Enlace, CRA, SRA, FAA y Coninagro, que serán en conjunto quienes bajen los lineamientos de elaboración de información.
Es en este marco la FunPel la responsable de la obtención de datos y su publicación para que el Observatorio funcione concretamente como un espacio neutral por fuera de la cadena formal, pero puede influir su opinión y datos para la promoción de políticas que puedan generar cambios estructurales.
Con nueve puntos clave e desarrollo este espacio permitirá avanzar sobre la lechería mundial, la lechería argentina, la producción primaria en sus aspectos productivos y económicos, la industria láctea, la comercialización, el mercado externo, la cadena de valor y que también incluyan informes y estudios, que se podrán presentar mensualmente.
Si bien ayer se hizo una presentación general, donde también se incluyó un detalle de la forma de analizar la formación de precios, que rescatará técnicamente la constatación de la necesidad de cobro del productor y capacidad de pago de la industria, con un criterio homogeneizado, empleando una metodología de 2008 del INTA, vigente hasta 2012, contemplando 33 modelos productivos, que en su momento no pudo publicar resultados y hoy se retoma por la convicción en cuanto a su efectividad, a cargo de las especialistas Patricia Engler y Laura Gastaldi.
Finalmente, con la exposición de Enrique Cartier del Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos, se avanzó sobre la mirada del reparto de renta sobre los productos finales y una mirada particular sobre la ecuación muy ampliada del IVA, en este sentido. Sin embargo, nos vamos a quedar con una manifestación particular que compartieron tanto Cartier como Giraudo, sobre la cadena comercial. Este punto clave de los valores en la lechería para ambos "no es un actor de la cadena, porque solo influyen el 30 por ciento el total de las ventas de los lácteos". Claramente en los momentos de debate sobre los criterios a aplicar este será uno de los puntos de mayor desacuerdo.
La importancia de FunPel, que fue la que originalmente había planeado una duplicación para la lechería argentina hacia 2020, previo a la debacle entre gobierno y campo de la gestión Ejecutiva anterior, que tenía acuerdo de partes, pero con la ruptura política se desdibujó. Hoy la intención de responsabilizar a este espacio con el Observatorio Lácteo es generar un espacio intermedio entre entidades de la producción y la industria y el Gobierno, pero que debe superar el escollo de los plazos, de concretar ideas, de consensuar y de formalizar una estructura de negocios muy compleja que tiene gran potencialidad nacional, pero que se debilita con el paso del tiempo y de manera constante.
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