La entidad ruralista provincial se reunirá hoy para elaborar un diagnóstico que el lunes se elevará al Gobernador. Se intenta convencer a Ricardo Buryaile que asista al encuentro en Santa Fe, para acercarle la problemática vigente y reiterada.
Por Elida Thiery - Que la situación hídrica nos hizo llegar a un límite está por demás claro, el tema es entender la manera en la que podemos salir de la mejor manera de esta situación. No será sencillo, rápido, ni económico, pero es algo que se tiene que hacer ahora para poder ordenar a una de las zonas productivas más importantes del país. Esto es algo que tienen que entender los gobiernos, tanto provincia, como Nación, pero no con las estrategias puestas en marcha al momento.
A más de dos semanas del inicio del desastre, la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe, reunirá hoy a sus dirigentes para elaborar lo más parecido a un diagnóstico, de una emergencia que aún no se puede cerrar, ni enumerar por completo; sin embargo la entidad que nuclea a las instituciones locales ya pidió una audiencia urgente con el Gobernador y los ministros decisores para el sector.
Dialogando con CASTELLANOS, Gustavo Vionnet, el esperancino presidente de Carsfe confirmó esta información y, agregando que será el lunes por la tarde que Miguel Lifschitz, junto a Luis Contigiani, de Producción y José Garibay, de Infraestructura y Transporte, para hacer planteos muy concretos.
«Vamos a elaborar un diagnóstico y con ello la propuesta que vamos a elevar al Gobernador el lunes», anticipó.
Con una amplísima cuota de conciencia y realidad, Vionnet señala algo en lo que coincide esta sección que es que «hacer evaluaciones de pérdidas ahora no tiene mucho sentido, porque se esperan más lluvias. No queremos hacer análisis en números, porque todo esto no terminó todavía», por eso, la mirada de la entidad santafesina está orientada en algo más real.
«Nuestra incógnita está puesta en cómo sacar a la política de la alternancia del trabajo de un año en gestión y otro año en elecciones», ya que esas interrupciones en los mandatos «hacen que se tomen todas decisiones cortoplacistas y no estructurales. Nadie trabaja en el mediano y largo plazo, por lo tanto lo que pretendemos es que los gobiernos tengan equipos que puedan hacer esto, en la coyuntura. Si bien no podemos decirle nosotros a la política qué hacer, si debemos pedir que se piense hacia adelante por varios años, con proyectos, presupuestos y programas de obras».
Lo que sostiene Vionnet es muy concreto, «no puede ser que sigamos sin tener un análisis de las distintas zonas hídricas de la provincia, con el detalle de cada una de ellas, con los gobiernos regionales que puedan controlar que el agua no se pase de un lado al otro». De todas maneras, «más allá de las canalizaciones inmediatas que se pueden hacer, yo quiero que se hable de cuál es el proyecto para resolver técnicamente el problema de agua de la provincia. Porque las máquinas pueden canalizar, pero no se sabe cómo. El problema que tenemos es que no hay planeamiento, no hay estudios de cuencas con las grandes obras que se necesitan, no hay planes maestros para grandes zonas de la provincia», lo cual debería abarcar la atención del agua que llega desde el este cordobés.
En resumen, «Carsfe, más allá de la coyuntura pretende el trabajo sistémico de la problemática hídrica y vial de la provincia. Pedimos que se empiece a pensar en el mediano y largo plazo, hoy, para que las obras se den en un marco profesional». Mientras llegan eso, las zonas productivas padecen las décadas de abandono. «En abril nadie les dio ayudas a los productores y los tamberos en este momento ya no tienen ni cuero, entonces es un momento para ponerse de acuerdo entre la provincia y el Gobierno Nacional», por lo tanto «si ahora no llega una ayuda extraordinaria, la guadaña va a venir tres veces más fuerte de lo que pasó en abril de 2016, porque los sistemas productivos vienen de años de pérdidas y de crisis que no permiten pasar varios meses sin cobrar un peso, por descapitalización y transformación del negocio».
A más de dos semanas del inicio del desastre, la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe, reunirá hoy a sus dirigentes para elaborar lo más parecido a un diagnóstico, de una emergencia que aún no se puede cerrar, ni enumerar por completo; sin embargo la entidad que nuclea a las instituciones locales ya pidió una audiencia urgente con el Gobernador y los ministros decisores para el sector.
Dialogando con CASTELLANOS, Gustavo Vionnet, el esperancino presidente de Carsfe confirmó esta información y, agregando que será el lunes por la tarde que Miguel Lifschitz, junto a Luis Contigiani, de Producción y José Garibay, de Infraestructura y Transporte, para hacer planteos muy concretos.
«Vamos a elaborar un diagnóstico y con ello la propuesta que vamos a elevar al Gobernador el lunes», anticipó.
Con una amplísima cuota de conciencia y realidad, Vionnet señala algo en lo que coincide esta sección que es que «hacer evaluaciones de pérdidas ahora no tiene mucho sentido, porque se esperan más lluvias. No queremos hacer análisis en números, porque todo esto no terminó todavía», por eso, la mirada de la entidad santafesina está orientada en algo más real.
«Nuestra incógnita está puesta en cómo sacar a la política de la alternancia del trabajo de un año en gestión y otro año en elecciones», ya que esas interrupciones en los mandatos «hacen que se tomen todas decisiones cortoplacistas y no estructurales. Nadie trabaja en el mediano y largo plazo, por lo tanto lo que pretendemos es que los gobiernos tengan equipos que puedan hacer esto, en la coyuntura. Si bien no podemos decirle nosotros a la política qué hacer, si debemos pedir que se piense hacia adelante por varios años, con proyectos, presupuestos y programas de obras».
Lo que sostiene Vionnet es muy concreto, «no puede ser que sigamos sin tener un análisis de las distintas zonas hídricas de la provincia, con el detalle de cada una de ellas, con los gobiernos regionales que puedan controlar que el agua no se pase de un lado al otro». De todas maneras, «más allá de las canalizaciones inmediatas que se pueden hacer, yo quiero que se hable de cuál es el proyecto para resolver técnicamente el problema de agua de la provincia. Porque las máquinas pueden canalizar, pero no se sabe cómo. El problema que tenemos es que no hay planeamiento, no hay estudios de cuencas con las grandes obras que se necesitan, no hay planes maestros para grandes zonas de la provincia», lo cual debería abarcar la atención del agua que llega desde el este cordobés.
En resumen, «Carsfe, más allá de la coyuntura pretende el trabajo sistémico de la problemática hídrica y vial de la provincia. Pedimos que se empiece a pensar en el mediano y largo plazo, hoy, para que las obras se den en un marco profesional». Mientras llegan eso, las zonas productivas padecen las décadas de abandono. «En abril nadie les dio ayudas a los productores y los tamberos en este momento ya no tienen ni cuero, entonces es un momento para ponerse de acuerdo entre la provincia y el Gobierno Nacional», por lo tanto «si ahora no llega una ayuda extraordinaria, la guadaña va a venir tres veces más fuerte de lo que pasó en abril de 2016, porque los sistemas productivos vienen de años de pérdidas y de crisis que no permiten pasar varios meses sin cobrar un peso, por descapitalización y transformación del negocio».
Suplicar
«Aspiramos a que el lunes venga Buryaile. Se están haciendo gestiones», remarca Gustavo Vionnet, en alusión a los múltiples pedidos que se le están haciendo al reticente ministro de Agroindustria para que llegue a la zona.
Con la coincidencia de inundaciones, con incendios en La Pampa y Río Negro, la cercanía a Buenos Aires tiene peso y desluce las desgracias de nuestra región, sin embargo hay una gran presión de Confederaciones Rurales Argentinas, para que su representante en el Gobierno - ya que Buryaile llegó a ser vicepresidente- interprete la necesidad de tener que movilizarse, tal como debió suceder en 2016.
«Sería bueno que empiecen a trabajar juntos, que dejen a la política de las elecciones por un tiempo, porque no estamos en condiciones de todo eso y empiecen a ver qué se puede hacer», sostiene el titular de Carsfe sobre la puesta en común de esfuerzos y aguardando por señales positivas.
La confusión o el desconocimiento del problema lechero por parte del Ministro de Agroindustria atenta hoy contra las necesidades reales. Lejos estamos de padecer sólo la problemática mundial, quedó muy atrás la tonelada a cinco mil dólares y los precios de corte a los que reiteradamente cita como una herencia nociva. Debe Ricardo Buryaile hablar más con quienes saben y mucho del sector dentro de su entidad de origen, CRA, para entender lo que pasa, el desorden reinante, la falta de precio real, los desajustes en la cadena, e incluso la influencia de los costos industriales y la suba de cifras que de manera constante hace el comercio, dejando de lado al eslabón primario. En tanto, los números de las industrias se desploman con recepción de materia prima que cada vez suma más puntos arriba del 40 por ciento en negativo y donde valdrá mucho lo que se pague por litro y las pymes deberán resistir ante las más grandes.
Quizá para eso se precisa tiempo que hoy se use en campaña, la que se enfoca a las legislativas y que tanto lo orienta a Formosa.
Muchas veces detallamos en este espacio gestiones anteriores y los riesgos del incumplimiento de la función pública, por diversos motivos, triste sería en este marco desolador, retomar ese tipo de consideraciones, mientras se está buscando y necesitando ayuda.
La política se debe poner al servicio de los ciudadanos y reconsiderar el impacto que este fenómeno climático genera en la producción, con una proyección a un año que será muy complejo a causa de todo esto, en los social y económico.
«Aspiramos a que el lunes venga Buryaile. Se están haciendo gestiones», remarca Gustavo Vionnet, en alusión a los múltiples pedidos que se le están haciendo al reticente ministro de Agroindustria para que llegue a la zona.
Con la coincidencia de inundaciones, con incendios en La Pampa y Río Negro, la cercanía a Buenos Aires tiene peso y desluce las desgracias de nuestra región, sin embargo hay una gran presión de Confederaciones Rurales Argentinas, para que su representante en el Gobierno - ya que Buryaile llegó a ser vicepresidente- interprete la necesidad de tener que movilizarse, tal como debió suceder en 2016.
«Sería bueno que empiecen a trabajar juntos, que dejen a la política de las elecciones por un tiempo, porque no estamos en condiciones de todo eso y empiecen a ver qué se puede hacer», sostiene el titular de Carsfe sobre la puesta en común de esfuerzos y aguardando por señales positivas.
La confusión o el desconocimiento del problema lechero por parte del Ministro de Agroindustria atenta hoy contra las necesidades reales. Lejos estamos de padecer sólo la problemática mundial, quedó muy atrás la tonelada a cinco mil dólares y los precios de corte a los que reiteradamente cita como una herencia nociva. Debe Ricardo Buryaile hablar más con quienes saben y mucho del sector dentro de su entidad de origen, CRA, para entender lo que pasa, el desorden reinante, la falta de precio real, los desajustes en la cadena, e incluso la influencia de los costos industriales y la suba de cifras que de manera constante hace el comercio, dejando de lado al eslabón primario. En tanto, los números de las industrias se desploman con recepción de materia prima que cada vez suma más puntos arriba del 40 por ciento en negativo y donde valdrá mucho lo que se pague por litro y las pymes deberán resistir ante las más grandes.
Quizá para eso se precisa tiempo que hoy se use en campaña, la que se enfoca a las legislativas y que tanto lo orienta a Formosa.
Muchas veces detallamos en este espacio gestiones anteriores y los riesgos del incumplimiento de la función pública, por diversos motivos, triste sería en este marco desolador, retomar ese tipo de consideraciones, mientras se está buscando y necesitando ayuda.
La política se debe poner al servicio de los ciudadanos y reconsiderar el impacto que este fenómeno climático genera en la producción, con una proyección a un año que será muy complejo a causa de todo esto, en los social y económico.
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