A punto de cumplir nueve décadas, la empresa láctea líder
impulsa una nueva mirada sobre la producción y la cadena lechera.
Este año se enfoca el programa de dos días en la “Tecnología
y Producción Sustentable”.
Con el salón Juan Pablo II de la Universidad Católica
Argentina en Puerto Madero colmado el
comienzo de las actividades estuvo dado por la bienvenida de Gustavo De La Vega,
director de Compra de Materia Prima de Mastellone Hermanos.
Agradeciendo la asistencia y el interés por continuar
apostando a la actividad lechera, el titular de la empresa que comercializa los
productos de marca La Serenísima no dejó de lado la incertidumbre de estos
tiempos políticos y económicos, sin embargo subrayó que las dos temáticas centrales
de este encuentro permiten “incrementar la producción y aportan una mirada
hacia el futuro”.
“La tecnología es esa herramienta que extiende los límites
de la productividad y nos facilita el trabajo”, reconociendo el esfuerzo que
comienza en el tambo y que la empresa le dio continuidad renovando la línea de
envases PET, lanzando leches fluídas diversificadas e incluso nuevos productos
orientados a la repostería, como parte de una expansión que suma valor a los
lácteos y que con base en el mercado interno y 70 mil puntos de venta en todo
el país, comienza a extenderse a países limítrofes de una mejor manera, gracias
a la alianza con Arcor.
De cierta manera, Mastellone Hermanos entiende hoy al
negocio de la lechería mucho más allá de los productos tradicionales dentro y
fuera del país, con una conciencia en la expansión que sostienen en estas nueve
décadas a la empresa como líder.
Con tres ejes apuntados al consumidor, el medio ambiente, la
responsabilidad social y la fase económica componen el mapeo de la firma que
sigue acercándose a sus destinatarios.
La Serenísima es la empresa que apuesta de manera constante
a la promoción del consumo, no sólo de productos puntuales sino de lo más
clásico que es la leche fluida. “La fortaleza que tenemos es la de llegar de
manera directa a los consumidores de todo el país con productos frescos.
Consideramos que la leche es un alimento de primera necesidad y estamos
preparados para estar en 70 mil puntos de venta todos los días con productos
frescos”.
Marca, calidad y tradición se combinan en el tránsito de
nueve décadas en las que todos los vaivenes nacionales fueron superados y se
tiende a fidelizar cada vez más el vínculo con los productores, que son el
inicio de un proceso estructural en la vida cotidiana de cada consumidor.
En una primavera que promete más leche que la anterior y un
balance anual que dejaría una leve alza productiva, este tipo de encuentros
tienden a motivar a quienes están en el sector a seguir apostando al esfuerzo
de hacer leche, de la mejor manera y con buenos resultados en todo sentido.
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