En la primera reunión por la conciliación obligatoria citada por el Ministerio de Trabajo, el gremio pidió que se reconozca el aumento del costo de vida. La semana próxima habrá otro encuentro.
Por Elida Thiery - De manera precipitada, en medio de la situación sabida de la pandemia por coronavirus, este miércoles se empezó a debatir la paritaria de los trabajadores de las industrias lácteas.
Si bien desde el Gobierno se habían aceptado recortes salariales en algunos rubros, e incluso se estaban prorrogando las negociaciones paritarias en general, a este punto se llegó luego de una serie de medidas de fuerza que incluyeron cuatro días de quite de colaboración y una jornada consecutiva de paro en todo el país, convocado esto por la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina.
Fue entonces que el Ministerio de Trabajo de la Nación había dictado la conciliación obligatoria por 15 días y en ese marco se retomaron las asambleas en las empresas, incluso hasta el día de hoy, alegando que las empresas habían promovido una prórroga en la reunión que hoy se concretó, originalmente agendada para el viernes pasado, hecho que tuvo una modificación por parte de la cartera laboral nacional. Se pidió entonces que se finalicen este tipo de reclamos que afectan a la producción en las plantas, mientras continúe el diálogo por los salarios, tal como lo dispone la conciliación e incluso el sentido común.
Superado esto, a través de una plataforma virtual y por unas cinco horas, cada una de las partes pudo exponer su punto de vista en un conflicto repentino, porque no tuvo instancias de negociación intermedias.
Con el rechazo del Centro de la Industria Lechera y de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas, participó una representación de SanCor Cooperativas Unidas Limitada, que si tuvo la aprobación de Atilra, irrupción que cambiara en enero la homologación de la paritaria anterior de diciembre, sobre la cual esta semana el Ministerio de Trabajo debería volver a expedirse.
Con más leche procesada, pero con menores ventas en los supermercados, con datos del INDEC que explican en mayo que la manteca subió 18 por ciento en la demanda, las leches no refrigeradas crecieron 12 por ciento en las ventas, más de ocho puntos el dulce de leche, una cifra similar las leches en polvo y sólo dos por ciento los quesos cremosos. El resto de los productos tienen cifras negativas, tal como se refleja en el cuadro adjunto difundido por el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina.
En esta línea es que Atilra pidió que se contemple un aumento relativo a la inflación acumulada de enero a junio, de 13,6 puntos, para que no se atrasen los salarios de los trabajadores. Lo que habrá que ver es cómo se van a computar el punto extra que se había adelantado en el acuerdo de diciembre y los bonos pagados por las empresas grandes, siendo esto último lo discutido por la pymes, de acuerdo a lo firmado con anterioridad.
El sindicato también pide que se aseguren los aportes gremiales, e incluso que no se descuente el día de paro del lunes 13. Al momento no hubo menciones específicas sobre los aportes para la obra social.
En concreto, la reunión extensa fijó un cuarto intermedio hasta el próximo martes, cuándo se dé continuidad a la negociación en el mismo formato virtual.
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