Es por los 209 mil litros que Hilda dió en toda su vida, en un tambo de Grant, Wisconsin.
Este era el récord registrado por la Asociación Holstein de Estados Unidos, que fue batido por otra vaca, también de Wisconsin.
Hilda murió en 2020 unos dos meses después de establecer el nuevo récord nacional, por un caso grave de mastitis, produciendo 460.720 libras de leche (unos 209 mil litros) durante su vida en el tambo de de Andy Buttles, en el condado de Grant, Wisconsin. El animal fue reconocido hace algunas semanas.
Su dueño contó en diferentes medios que Hilda no fue una vaca de exhibición, pero si tenía un “tamaño moderado con una súper ubre”.
El cambio en la mirada de la raza Holando, pasando de los grandes animales a los de un tamaño intermedio, pero con grandes condiciones de producción, nunca requirió cuidados especiales. Nacida en su tambo, en 2005, era hija de una vaca “que no tenía la ubre más bonita”, sin embargo la cruza se hizo con un toro que venía de una madre con mejores condiciones en la ubre y el resultado fue excelente. Fue una productora récord y obtuvo una puntuación de Excelente durante toda su vida productiva, clasificada oficialmente EX-90 4E.
Su mejor récord se estableció durante la lactancia de nueve años, cuando produjo 48.200 libras (casi 21.900 litros) de leche con un ordeño tres veces al día, una rutina que sostuvo durante los últimos seis años de su vida. Hilda tiene hoy en el tambo hijas y nietas que siguen produciendo, con un seguimiento bien detallado, gracias al uso de collares que permiten el control de cada animal y el desempeño completo de la producción.
Lo que Buttles destacó es que Hilda sola, “llenó nueve camiones cisterna de leche en su vida, es una locura", sin embargo reconoce su dueño que jamás le sacaron una foto, porque la naturalidad con la que tomaban su rendimiento no los hizo notar la diferencia, sino hasta que llegó este reconocimiento entre criadores, un hecho que fue diferente para Stone-Front Iron Pasta, que obtuvo una calificación EX-96, reservado gran campeón en la World Dairy Expo 2010.
La familia Buttles se estableció en el condado de Racine en 1840, antes de que Wisconsin se convirtiera en Estado. La lechería se convirtió en una tradición familiar transmitida de una generación a la siguiente, ya que crian animales de raza Holando registrados desde 1913, trasladando la operación del tambo a partir de 1997 a Lancaster, luego de graduarse Andy en la Universidad de Wisconsin-Madison, modernizando la unidad productiva en tecnología, pero también en la calidad del rodeo.
Desde los 200 animales de entonces, ahora tienen un rodeo de 1.200 animales, con un mayor despegue en número durante los últimos cinco años, en una 800 hectáreas con 22 personas en el equipo de trabajo y una calidad que promedia el 4,3 por ciento de grasa en el total producico y 3,04 por ciento de proteínas.
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