SanCor: se pondrán las condiciones para negociar un fideicomiso

En una reunión virtual, se encontrarán representantes de la cooperativa láctea con el grupo de empresarios que intentan acceder a dineros públicos para expandir la productividad de la firma. No se firmará nada, sino que se iniciarán las charlas formales para poder avanzar hacia el pedido de fondos estatales, por parte de privados.

Por Elida Thiery (Agrofy News) - Hace unos meses, con un paro nacional era la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina la que se oponía y exponía la disconformidad con la intención de un puñado de empresarios amigos del Gobierno de entrometerse en la Cooperativa Láctea SanCor, usando dinero público, pero sobre todo, por la intención de achicar la planta de personal de la misma, con lo cual se debilitaría al gremio.
Llegaron luego encuentros en los que lentamente el sindicato fue calmando sus ánimos e incluso fueron motivados a indicar que ya estaba cerrado un acuerdo, cuando sólo se hablaban de intenciones, pero con la promesa de meterlos en una suerte de fideicomiso.
Pasó el tiempo, incluso Atilra cerró la actualización de paritaria dejando entrever que este vínculo con SanCor estaba en la nada y puede que el cierre del año haya despertado la ansiedad de recuperar una negociación. Fue así que desde el gremio comenzaron en los últimos días las gestiones para reavivar la idea que no queda en la intención de José Urtubey, el principal interesado como presidente de Celulosa Argentina, Marcelo Figueiras del Laboratorio Richmond, Gustavo Scaglione que opera como titular de los medios La Capital de Rosario y Canal 3, siendo parte del grupo Vila-Manzano, el coordinador más vinculado al sector, Jorge Estévez, además del abogado Leandro Salvatierra.
Aunque al sindicato le moleste, este “grupo de amigos del Gobierno”, no sólo temrina sus vínculos con lo más alto del Ejecutivo nacional, sino que llega a gestar conexiones con el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, pero también con el Gobierno de la Provincia de Santa Fe.
Gente que no es del sector lechero tiene la intención de meterse en un negocio que no es fácil, pero que desempolva la intención de 2006 que quedara trunca por la voluntad venezolana y los compromisos del entonces gobierno con Hugo Chávez.
En sucesivas operaciones mediáticas se tiraron cifras al azar, pero jamás se detallaron reales planes para llevar a cabo dentro de la Cooperativa, incluso jamás se explicaron cuestiones que el Gremio cuestionaba como la intención de achicar la planta de personal, o incluso gestionar el registro en otras ramas sindicales como sucede en la única empresa que está cerca de toda esta intención.
Es entonces que se dejó trascender públicamente hoy, siempre por los mismos medios, que en la noche de este viernes se llevará a cabo una reunión virtual entre los representantes de la cooperativa láctea SanCor y el grupo de empresarios que quiere tener acceso a la misma.
No se firmará el fideicomiso como se quiere imponer, porque no se puede hacer semejante acto sin fijación de condiciones, las cuales no existen al momento, ni se comenzaron a tratar.
Se generará entonces hoy el primer encuentro formal para poder plantear condiciones de negociación, para ver si se accede a una propuesta final que le permita a este grupo ir a golpear la puerta del Banco Nación en busca de fondos. SanCor tendrá el poder de sostener condiciones y plazos que de no cumplirse harán caer este indicio de propuesta de los privados que quieren aterrizar en el negocio lechero.
El pedido que fue explicitado en un marco periodístico sería de 60 millones de dólares iniciales, que debería desenbolsar la banca pública en un marco de crisis económica reinante y visible.
El planteo que hace el “grupo de amigos” es que la deuda de SanCor es de 384 millones de dólares, lo cual es una proyección a cinco años y de no contar con ingreso alguno de fondos, ni siquiera los habituales. Actualmente el pasivo no exigible, o sea que no tiene vencimiento inmediato y que cuenta con planes de pago, llega a los 250 millones de dólares, cuyos pagos se cumplen en los plazos acordados.
Estas cifras infladas son las que más llaman la atención y más dudas generan en quienes están mirando de cerca las negociaciones.
Lo que viene para adelante es un detalle de estrategias de inversión, metodología de trabajo, que permita hacer un detalle que se plasme en una propuesta concreta, que una vez que tenga a disposición el dinero deberá ser sometida a consideración de los socios tamberos que son los verdaderos dueños de SanCor, que deberán votar y a partir de una amplísima mayoría determinar el futuro de este fideicomiso.
El proceso es largo y el apuro del gremio es el que pone en marcha nuevamente esta maquinaria, que no recibirá ni un centavo privado, que depende exclusivamente de los fondos públicos, esos que faltan para tantas cosas en el país y que en su momento le fueron negados de manera directa a la Cooperativa.
Existe con la intromisión que intenta ser velada del Gobierno un malestar creciente y afianzado entre los productores que son los que tienen que ofrecer su voluntad si toda la negociación llega a consolidarse.
También se demora otra propuesta que debería haber llegado en estas semanas y que quizá con otras urgencias de gestión se demora. Para algunos el hecho de reflotar a estos privados que no son del sector no hace más que complicar una salida más genuina.
Tiene SanCor que tomar muy seriamente el proceso que se inicia hoy, entender la responsabilidad que se presenta.
Es entendible que la Cooperativa necesite de fondos para crecer, para pasar de los 700 mil litros actuales a 1,5 millones de litros procesados por día, sin embargo, no se debe aceptar la primera oferta que aparezca, más aún si está tan viciada desde su inicio. También le corresponde a SanCor poner sus condiciones, no sólo en cuanto a como podría ser un negocio, sino a como se utiliza el nombre de la Cooperativa y cómo se sirve el poder de una empresa que más chica y más debilitada no pierde calidad, ni repercusión entre los consumidores nacionales y de países vecinos.

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