Colonia Mauá contactó a la empresa Pampa Cheese para que agilice el pedido de obras para tres kilómetros en un sector que beneficiaría a cientos de personas y al menos dos escuelas, además del transporte de producción agropecuaria y de leche, especialmente.
A través de una nota a la industria láctea Pampa Cheese solicitó “colaboración para el mantenimiento y reparación del camino comunal Nº 4. Dicho camino, ripiado gracias al esfuerzo de productores y comunas; es una vía de nexo fundamental con la localidad vecina de Colonia Ituzaingó por la que cientos de habitantes de ambas localidades transitan para tener acceso a alimentos, educación y salud”.
“La misma, en días de lluvia, es afectada considerablemente por la circulación de camiones y/o tractores que retiran la producción láctea de nuestro distrito y del distrito vecino. Somos conscientes de la importancia de la actividad láctea y que por considerarse un producto perecedero, necesita su traslado lo antes posible; pero también debemos velar por los derechos básicos de nuestros habitantes”.
Siendo gobernada por un referente del Frente Progresista Cívico y Social explicaron que “luego de haber solicitado al Gobierno de la Provincia, a través del Fondo de Obras Menores, la construcción y luego la reparación de dicha traza; ya no podemos más incorporar ese camino en nuevos proyectos; y nos vemos en la necesidad de solicitar su colaboración para poder arbitrar el cumplimiento de los derechos antes mencionados y el traslado de la producción”.
El pedido incluye mejoras en la calidad de vida de 27 niños en edad escolar, nueve que cursan el pre-escolar, once adolescentes que asisten a la escuela secundaria, 81 empleados y/o familiares mayores residentes en establecimientos productivos, 90 productores, 53 arrendadores, dos transportistas lácteos, 20 transportistas ganaderos y cerealeros, 15 proveedores de alimentos y/o insumos, dos empresas lácteas, la Escuela Nº 962 “Domingo Faustino Sarmiento” y la Escuela Nº 946 “Carlos M. Alvear”.
Semejante impacto social está ligado tan sólo a la mejora de una traza de tres kilómetros de extensión, con ripio, mano de obra que ofrece la comuna y que precisa de una inversión estimada en 3.105.000 de pesos tan sólo para el material, trabajo que permita luego hacer un mantenimiento para que la obra tenga proyección hacia adelante.
La cercanía con Pampa Cheese hizo que la empresa genere expectativas en la Comuna, sin embargo la pyme no tiene la capacidad de dar esta respuesta en infraestructura, que tampoco le corresponde, porque con los impuestos de tambos, vecinos, e incluso la propia empresa es que se tienen que hacer este tipo de obras, luego de años de recaudación.
Esta pyme que tiene 45 tambos que cada día le remiten su leche directamente además de otras cooperativas, está desarrollando una planta de tratamiento de efluentes que promete ser la más moderna de la provincia de Santa Fe, por lo tanto no puede un privado afrontar semejante costo y abarcar la responsabilidad de lo público.
Lo que sí hizo la industria que procesa más de un millón de litros semanales, es ser el nexo entre la Comuna de Mauá y el Gobierno provincial. Es por eso que semanas atrás estuvo en el lugar el Director Provincial de Lechería, recorriendo tambos, la región, incluyendo a la Comuna de Ituzaingó, además de Mauá y también conoció la planta industrial.
A Abel Zenklusen lo recibieron Daniel Fedjelson, encargado de producción; Gustavo Kerc, encargado de mantenimiento y Gastón Rotar, como Jefe de Producción, además del productor de leche y proveedor de la industria, Daniel Ribero.
Zenklusen explicó a Agrofy News que hay parte de la traza en tratativas ya para poder desarrollarla ante Vialidad Provincial, en el marco del programa Caminos de la Ruralidad y este pedido podría incluirse en la misma, aunque los plazos demanden varios meses para su concresión.
Algo es algo
Cuando se analiza el potencial productivo de la zona núcleo, de la región Pampeana, al ampliar un poco la mirada, las complicaciones en cuanto a la infraestructura es lo que restan competitividad.
Mientras que en otros países con condiciones similares o incluso menos cualitativas, los caminos asfaltados son la norma para poder trabajar más allá de las condiciones climáticas, la comunicación está garantizada y así se sostiene a la población rural en su lugar, en nuestro país se hace cada vez más complejo el cuadro.
Lo habitual aquí es que de una ruta, que suele no tener mantenimiento, cruzan caminos de tierra por donde deben circular la maquinaria, los camiones, siempre y cuando las lluvias no sean seguidas, aunque es sabida su absoluta necesidad. El que tiene el campo ubicado más cerca de esa ruta asfaltada es quién seguramente sobrevivirá a las inclemencias económicas, políticas y también climáticas para seguir produciendo alimento en esa tierra. Quienes trabajan de otra manera, en otros países, no pueden comprender cómo es que se sigue adelante en estas condiciones.
Mejorar los caminos por los que se trasladan los productos que traerán el mayor caudal de dólares al país es algo que ningún gobierno piensa, porque las estrategias en marcha marcan mínimos parches para los sectores más complicados, pero no tienen el impacto efectivo que deberían tener en las tareas cotidianas.
Particularmente en la provincia de Santa Fe se puso en marcha esta estrategia de Caminos de la Ruralidad que en casi tres años suma compromisos por 494 kilómetros. En unos 30 meses de gestión se podrían repartir en 16 kilómetros por mes hechos en toda la provincia, aunque no todos están terminados y habilitados.
Esta semana se habilitaron 5.694 metros de un camino ripiado en Colonia Aldao, que representó una inversión de 20.178.000 pesos, beneficiando en el Departamento Castellanos, beneficiando a tres productores ganaderos, 4 agricultores, 7 apicultores con 350 colmenas y siete tambos que producen más de 7 millones de litros de leche al año. En el mismo acto se firmó un compromiso para el mejorado de 13.370 metros de una traza en Sunchales que conecta a la escuela N° 1192 Fortín de Sunchales y el Jardín de Infantes Nucleado N° 167.
Los plazos son el mayor dilema en este Programa, porque en 2020 se hicieron 64,7 kilómetros en total, siendo el departamento Castellanos el más beneficiado. Para 2021, el departamento San Cristóbal tuvo la principal inversión con 56,35 kilómetros, seguido por San Jerónimo, Las Colonias y San Justo, sumando 282,06 kilómetros que no todos están terminados e inaugurados.
Para este año, también Castellanos está siendo el de mayor superficie acordada para el ripiado, con 35,21 kilómetros, seguido por Las Colonias y General López, de un total de 147,29 acordados al momento.
Los plazos burocráticos del estado provincial hacen que muchos de estos acuerdos no se concreten con la agilidad que se esperan, pero cierto es que avanzan en difersos puntos de la provincia, muchos dependiendo de compromisos firmados el año anterior.
Este ejemplo de Colonia Mauá demuestra que con una pequeña inversión, que debiera estar cumplida hace años, se le puede modificar la vida cotidiana a una comunidad, mejorarle las condiciones de desarrollo. Estas no son obras extraordinarias y que se deban agradecer eternamente, sino que son deberes que cumplir por parte de quienes están en ámbitos de decisión y poder. Hacerlas es simplemente cumplir con la función pública y todos los avances que se pueden contar hasta el momento son una ínfima parte de la tarea.
Comentarios