FEDERACIÓN AGRARIA ARGENTINA ACORDÓ CON EL GOBIERNO LA MEDIDA Y SE DESMARCA DEL RESTO DEL CAMPO
Luego de los 30 centavos para tamberos, salen a endulzar a productores de granos con un fondo de 2.500 millones de pesos para repartir, mientras seguirán pagando derechos de exportación. Un mensaje de acercamiento nada cambia la historia transitada, que sobre todo desde 2005 con el combate a la ganadería, fue incrementando un enfrentamiento inédito con el sector.
Por Elida Thiery (Diario CASTELLANOS) . La obstinación con el sistema de retenciones para el Gobierno Nacional ha sido una de las costillas del ser kirchnerista. Antes de resignar un punto de retenciones, la Presidente de la Nación prefirió pelearse con el sector que le alimenta la caja del Estado, enfrentarse a todo el campo argentino, indignar a los más pequeños, revelar a los más grandes, tratándolos de especuladores, de ventajeros, de millonarios por tener camionetas 4x4 para trabajar, a quienes ayer se dirigió diciendo "les contaron que yo era mala, que yo era muy dura, es cierto, a veces soy dura, pero siempre con los de arriba, o nunca con los de más abajo".
Claramente la Presidente de la Nación que se autotituló como "una amiga", no recuerda lo que eran sus palabras en 2008, el cierre de las puertas para el diálogo, la agresión dirigida al sector que hoy, a nueve meses de dejar el cargo, pretende apaciguar los ánimos en medio de una crisis de precios y una emergencia agropecuaria. La señora manifestó que "con Federación Agraria tuvimos una conversación franca, llana", a través de la cual llamó a "desterrar prejuicios", redundando que el diálogo fue "claro, abierto, sincero", aludiendo a la figura de Omar Príncipe, el presidente de FAA, como el eje del acuerdo que trae una nueva ayuda a pequeños productores.
La memoria es lo que nos salva, siempre, con el libre pensamiento; y quizá sea lo que más le molesta al Gobierno de los periodistas, por eso, el fervor negativo al hablar de la profesión y su invitación a la población a pensarlo de manera constante.
Hoy con un anuncio oficial debemos recordar el tránsito del sector agropecuario en todos estos años. Creció la superficie sembrada porque fue exterminada la ganadería, la lechería está en baja constante, las economías regionales pierden en cada campaña, más allá de las cotizaciones internacionales, la maquinaria agrícola tiene un declive muy complejo para todos los segmentos de productos específicos de cada región.
La Presidente, desde su asunción y con su primer paro nacional en diciembre de 2007 por parte de los tamberos, fue la que más combatió al campo, desde sus discursos y sus decisiones, por lo tanto, con dos anuncios en dos semanas y sacando recién ahora a algunos funcionarios que parecían escondidos del Ministerio de Agricultura, a recorrer algunas regiones, los problemas no se resuelven y las heridas no se curan.
La señora atacó en reiteradas opotunidades a La Serenísima y a SanCor. El error es grave; dijo que las industrias no se queden con el subsidio de 30 centavos a tamberos, que lo paga el Gobierno directamente a productores y con un anuncio de gasoducto, parece hacer creer que desde mañana bajarían los costos productivos. Cristina Fernández confunde incluso los alcances de las medidas de su propio gobierno; y en un acto de fe los tamberos deben aguardar el pago completo de todo lo prometido, si tomamos como referencia auxilios incumplidos en años anteriores.
"El rencor no sirve de nada" en referencia a los reclamos que siguen vigentes desde 2008 dijo ella ayer, en la Cadena Nacional que abrió con demoras, como siempre, pero mencionando por única vez "no me estaba pintando las uñas", tarea que le demandará bastante tiempo, pero explicando que venía de reunirse con FAA para tomar una "decisión del Gobierno", "de común acuerdo", para generar un Fondo Especial de Estímulo para Pequeños Productores de Granos, en un acto en el Museo del Bicentenario donde hubo múltiples referentes de la política regional, empezando por Ana Meiners, intendente de Esperanza (localidad sobre la que habló de la historia de la familia Kirchner), nuestro Luis Castellano, además del senador departamental Alcides Calvo, el diputado Roberto Mirabella, hasta el diputado nacional y candidato justicialista a gobernador, Omar Perotti.
La medida "Brevemente" ella le cedió la palabra al ministro de Economía, Axel Kicillof, que cuando empezó a hablar logró escuchar los gritos de sus fanáticas militantes.
El funcionario detalló que "desde 2013 hay una caída en los precios de los granos" (situación que ya se había dado en 2009 y nada se hizo). Que "en el campo hay una diversidad de tamaños y renta", casi como un descubrimiento reciente y que de 70 mil, son 46 mil los productores que producen el 12 por ciento del trigo, maíz, soja y girasol, en un universo delimitado por información de AFIP, porque "la problemática del pequeño productor es específica".
Con una "campaña histórica de 115 millones de toneladas", a lo que Axel deberá ir restando las pérdidas por emergencia, el Gobierno no segmenta ni modifica el sistema de retenciones, sino que genera un fondo de 2.500 millones de pesos, a repartir entre 46.121, distribuido por hectárea producida, en una "medida progresiva", aunque el que más cobra es el que está entre 100 y 400 hectáreas. Kicillof dijo que los más chicos son "segregados", en uso de terminología desafortunada y poco adecuada al caso, y expone que la ayuda significaría "la mitad de las retenciones que deberían pagar este año". Deberán inscribirse en un registro, aunque ya estén identificados, pero a la Nación le encantan los recontra registros y desde el 15 de abril cobrarán (acumulando el 20 por ciento del fondo en esa entrega para actualizar esta etapa del año) cada 15 de cada mes, pero "según se vaya liquidando la cosecha", en esta idea de especulación que sobrevuela como un dron a todos los que osan tener soja en el campo.
Algunas de las preguntas que caben en este caso y sobre las que seguiremos trabajando serán por ejemplo: ¿por qué el Gobierno Nacional no accedió en años anteriores a dar ayudas para los pequeños productores?, ¿por qué la demonización fue constante y no desaparece del sector, sino que se desdibuja entre los más pequeños?, ¿por qué no se eliminan las retenciones o cual es el sentido de no segmentarlas realmente para los más pequeños si tan bien considerados se los tiene?, ¿por qué la militancia aplaude medidas que antes abucheaba?, ¿cuántos votos le puede sumar esto al Gobierno y sus candidatos en todo el país, o sobre todo en la región núcleo?, ¿cuánto de veracidad tiene esta decisión en la mirada sectorial desde la Casa Rosada? Son todas intrigas que iremos develando, simplemente con tiempo.
Decisiones históricas Ahora bien, lo de la FAA de Príncipe da susto, aunque no se hayan animado a salir en la Cadena, incluso. El candidato de Eduardo Buzzi para acceder a esa presidencia decía en campaña que la debacle institucional se iba a dar si ganaba su opositor Orsolini, que parecía cercano al Gobierno. Sin embargo desde el inicio de este año, el santafesino no dejó de sentarse nunca en la mesa oficial, alejado de la unidad de criterio, con diferencias lógicas, de la Comisión de Enlace.
Rechazando plegarse al paro reciente, pero reclamando, dejando con dudas la realización de la asamblea este próximo jueves frente al Magyp "si no hay respuestas antes", le decía a CASTELLANOS Ariel Toselli, el vicepresidente primero de FAA la semana anterior. Todo se relaciona.
La consecución de unas 200 mil toneladas de trigo para que exporte AFA en un número ínfimo para las necesidades del negocio argentino, la entidad se arrogó el subsidio tambero, e incluso hubo un rumor de un pago mensual a la entidad desde el Gobierno que hace una semana que no se aclara.
Claro que la entidad defenderá los derechos de los pequeños y ahí no hay réplica, pero cómo explicará la "traición" al resto del campo, ya que el grupo encabezado por Príncipe derribó los preconceptos que según CFK instalaron "grupúsculos de poder".
El neologismo parece querer correr lo que tantas otras cadenas nacionales mostraron claramente, sus mensajes cargados de negativa mirada sobre el campo en general, incluyendo a todos los productores y todas.
Es lamentable ver que con el cierre de un ciclo político y con la desesperación por conseguir votos en los diferentes distritos, ahora el Gobierno Nacional trate de conciliar sin decisiones de fondo, porque las retenciones no se cambiaron, solo habrá una ayuda ocasional.
La verdad está en la necesidad de votos, no en el cambio de mirada sobre el sector. A no perder la memoria, porque las retenciones siguen intactas.
Claramente la Presidente de la Nación que se autotituló como "una amiga", no recuerda lo que eran sus palabras en 2008, el cierre de las puertas para el diálogo, la agresión dirigida al sector que hoy, a nueve meses de dejar el cargo, pretende apaciguar los ánimos en medio de una crisis de precios y una emergencia agropecuaria. La señora manifestó que "con Federación Agraria tuvimos una conversación franca, llana", a través de la cual llamó a "desterrar prejuicios", redundando que el diálogo fue "claro, abierto, sincero", aludiendo a la figura de Omar Príncipe, el presidente de FAA, como el eje del acuerdo que trae una nueva ayuda a pequeños productores.
La memoria es lo que nos salva, siempre, con el libre pensamiento; y quizá sea lo que más le molesta al Gobierno de los periodistas, por eso, el fervor negativo al hablar de la profesión y su invitación a la población a pensarlo de manera constante.
Hoy con un anuncio oficial debemos recordar el tránsito del sector agropecuario en todos estos años. Creció la superficie sembrada porque fue exterminada la ganadería, la lechería está en baja constante, las economías regionales pierden en cada campaña, más allá de las cotizaciones internacionales, la maquinaria agrícola tiene un declive muy complejo para todos los segmentos de productos específicos de cada región.
La Presidente, desde su asunción y con su primer paro nacional en diciembre de 2007 por parte de los tamberos, fue la que más combatió al campo, desde sus discursos y sus decisiones, por lo tanto, con dos anuncios en dos semanas y sacando recién ahora a algunos funcionarios que parecían escondidos del Ministerio de Agricultura, a recorrer algunas regiones, los problemas no se resuelven y las heridas no se curan.
La señora atacó en reiteradas opotunidades a La Serenísima y a SanCor. El error es grave; dijo que las industrias no se queden con el subsidio de 30 centavos a tamberos, que lo paga el Gobierno directamente a productores y con un anuncio de gasoducto, parece hacer creer que desde mañana bajarían los costos productivos. Cristina Fernández confunde incluso los alcances de las medidas de su propio gobierno; y en un acto de fe los tamberos deben aguardar el pago completo de todo lo prometido, si tomamos como referencia auxilios incumplidos en años anteriores.
"El rencor no sirve de nada" en referencia a los reclamos que siguen vigentes desde 2008 dijo ella ayer, en la Cadena Nacional que abrió con demoras, como siempre, pero mencionando por única vez "no me estaba pintando las uñas", tarea que le demandará bastante tiempo, pero explicando que venía de reunirse con FAA para tomar una "decisión del Gobierno", "de común acuerdo", para generar un Fondo Especial de Estímulo para Pequeños Productores de Granos, en un acto en el Museo del Bicentenario donde hubo múltiples referentes de la política regional, empezando por Ana Meiners, intendente de Esperanza (localidad sobre la que habló de la historia de la familia Kirchner), nuestro Luis Castellano, además del senador departamental Alcides Calvo, el diputado Roberto Mirabella, hasta el diputado nacional y candidato justicialista a gobernador, Omar Perotti.
La medida "Brevemente" ella le cedió la palabra al ministro de Economía, Axel Kicillof, que cuando empezó a hablar logró escuchar los gritos de sus fanáticas militantes.
El funcionario detalló que "desde 2013 hay una caída en los precios de los granos" (situación que ya se había dado en 2009 y nada se hizo). Que "en el campo hay una diversidad de tamaños y renta", casi como un descubrimiento reciente y que de 70 mil, son 46 mil los productores que producen el 12 por ciento del trigo, maíz, soja y girasol, en un universo delimitado por información de AFIP, porque "la problemática del pequeño productor es específica".
Con una "campaña histórica de 115 millones de toneladas", a lo que Axel deberá ir restando las pérdidas por emergencia, el Gobierno no segmenta ni modifica el sistema de retenciones, sino que genera un fondo de 2.500 millones de pesos, a repartir entre 46.121, distribuido por hectárea producida, en una "medida progresiva", aunque el que más cobra es el que está entre 100 y 400 hectáreas. Kicillof dijo que los más chicos son "segregados", en uso de terminología desafortunada y poco adecuada al caso, y expone que la ayuda significaría "la mitad de las retenciones que deberían pagar este año". Deberán inscribirse en un registro, aunque ya estén identificados, pero a la Nación le encantan los recontra registros y desde el 15 de abril cobrarán (acumulando el 20 por ciento del fondo en esa entrega para actualizar esta etapa del año) cada 15 de cada mes, pero "según se vaya liquidando la cosecha", en esta idea de especulación que sobrevuela como un dron a todos los que osan tener soja en el campo.
Algunas de las preguntas que caben en este caso y sobre las que seguiremos trabajando serán por ejemplo: ¿por qué el Gobierno Nacional no accedió en años anteriores a dar ayudas para los pequeños productores?, ¿por qué la demonización fue constante y no desaparece del sector, sino que se desdibuja entre los más pequeños?, ¿por qué no se eliminan las retenciones o cual es el sentido de no segmentarlas realmente para los más pequeños si tan bien considerados se los tiene?, ¿por qué la militancia aplaude medidas que antes abucheaba?, ¿cuántos votos le puede sumar esto al Gobierno y sus candidatos en todo el país, o sobre todo en la región núcleo?, ¿cuánto de veracidad tiene esta decisión en la mirada sectorial desde la Casa Rosada? Son todas intrigas que iremos develando, simplemente con tiempo.
Decisiones históricas Ahora bien, lo de la FAA de Príncipe da susto, aunque no se hayan animado a salir en la Cadena, incluso. El candidato de Eduardo Buzzi para acceder a esa presidencia decía en campaña que la debacle institucional se iba a dar si ganaba su opositor Orsolini, que parecía cercano al Gobierno. Sin embargo desde el inicio de este año, el santafesino no dejó de sentarse nunca en la mesa oficial, alejado de la unidad de criterio, con diferencias lógicas, de la Comisión de Enlace.
Rechazando plegarse al paro reciente, pero reclamando, dejando con dudas la realización de la asamblea este próximo jueves frente al Magyp "si no hay respuestas antes", le decía a CASTELLANOS Ariel Toselli, el vicepresidente primero de FAA la semana anterior. Todo se relaciona.
La consecución de unas 200 mil toneladas de trigo para que exporte AFA en un número ínfimo para las necesidades del negocio argentino, la entidad se arrogó el subsidio tambero, e incluso hubo un rumor de un pago mensual a la entidad desde el Gobierno que hace una semana que no se aclara.
Claro que la entidad defenderá los derechos de los pequeños y ahí no hay réplica, pero cómo explicará la "traición" al resto del campo, ya que el grupo encabezado por Príncipe derribó los preconceptos que según CFK instalaron "grupúsculos de poder".
El neologismo parece querer correr lo que tantas otras cadenas nacionales mostraron claramente, sus mensajes cargados de negativa mirada sobre el campo en general, incluyendo a todos los productores y todas.
Es lamentable ver que con el cierre de un ciclo político y con la desesperación por conseguir votos en los diferentes distritos, ahora el Gobierno Nacional trate de conciliar sin decisiones de fondo, porque las retenciones no se cambiaron, solo habrá una ayuda ocasional.
La verdad está en la necesidad de votos, no en el cambio de mirada sobre el sector. A no perder la memoria, porque las retenciones siguen intactas.
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