Desde CREA a través del Proyecto Tambo en Foco, la sistematización en manuales de los procesos más habituales en la empresa lechera comienzan a demostrar resultados positivos. Este martes en Entre Ríos se realizará una actividad presencial para conocer más sobre el manual de “cría y recría”.
Con la intención de acercarle a los responsables de las unidades productivas mejores herramientas, desde CREA gestaron un proyecto que se denomina Tambo en Foco y que la semana próxima tendrá un interesante encuentro en el Establecimiento El Caraguatá.
Pedro Brandi, es integrante de la Comisión de Lechería de CREA y será anfitrión de un evento para poder ver de cerca una forma de continuar con procesos más ordenados dentro del tambo. Será el 17 de agosto, desde las 8:30 horas, a pocos kilómetros de Maciá, en una actividad abierta a productores tamberos.
La intención es facilitarle al productor medios para alcanzar mejores resultados. A partir de aquella encuesta se fijaron los principales objetivos. Crianza y recría, reproducción y atención de la vaca en el periparto, rutina de ordeño e instalaciones, sistemas de alimentación; y gestión ambiental, son los puntos clave.
“Se le propuso a las diferentes regiones lecheras de CREA que los grupos elijan un proceso y una empresa que hagan cada uno de los puntos bien y que después los puedan volcar, que puedan desgranar cada tema y mostrarlo una vez por año”, explica Brandi, por lo tanto a lo largo de seis años se podrán ver los resultados completos.
“Lo que podemos ver ahora es cómo cuatro empresas fueron seleccionadas para desarrollar distintos procesos. Dos eligieron crianza y recría, una en el este de Buenos Aires y nosotros que estamos ubicados en Entre Ríos en el Litoral sur. Otra empresa de la provincia de Córdoba eligió el tema de la alimentación mezclada y otra sobre alimentación por pastoreo, en 9 de Julio en la provincia de Buenos Aires”.
Es así que con la colaboración de CREA central se está organizando un evento para presentar de forma abierta, cada empresa mostrará el proceso que desarrolló. Así el próximo martes 9 de agosto en el campo de Pedro Brandi se mostrará lo que despliegan en cuanto a “crianza y recría”.
En este caso, se presentarán los nueve subprocesos que tiene la temática elegida, añadiendo una descripción muy minuciosa de cada una de las partes, no sólo en la forma de hacer, sino los resultados que se esperan, a dónde se quiere llegar, los resultados que se tienen, cómo mejorarlos, los riesgos, incluyendo todos los detalles.
“Finalmente se termina escribiendo un manual, donde se termina describiendo el proceso, donde se detalla cómo se hace, incluyendo los resultados”, con lo cual “cada una de las empresas a este trabajo lo hicimos con un gran detalle, poniendo todos los aspectos en blanco y negro, pudiendo ´despiezar´ bien cada parte”.
Brandi entiende que “tener todo por escrito sirve claramente para enteder cómo se hace lo que se hace, quién es responsable de cada cosa, por lo tanto así se achican las curvas de aprendizaje y así cuando una persona nueva se incorpora al grupo de trabajo, al tener el detalle de los protocolos, los instructivos y cada una de las cosas que tiene que hacer no tiene que adivinar nada”.
Esto brinda seguridades dentro de la empresa tambera, pero del mismo modo al construir esta herramienta por escrito se generaron cambios en los modos de hacer. “Cuando uno tiene las cosas en la cabeza, todo es posible, todo entra, pero cuando uno los vuelca en un papel, a medida que lo vas escribiendo surgen las preguntas de quién lo va a hacer, cómo, sin dejar nada en el aire. Así te das cuenta que hay cosas que no se hacen bien y permite corregir”.
Del mismo modo, “a medida que uno va repasando el manual va encontrando cosas nuevas que permiten hacer correcciones. En el caso nuestro el manual fue redactado hace un año y a esta altura ya hicimos unos cinco cambios, sobre cosas que no habíamos tenido en cuenta y que son importantes, por lo tanto, sirve para la mejora continua y para el aprendizaje, porque los que están hace mucho trabajando pueden ayudar a mejorarlo, mientras que los que se incorporan pueden aprender mejor a cómo hacer bien las cosas”.
Para el productor “es una herramienta espectacular” para mejorar los procesos que forman parte de la actividad.
“La idea es que estos manuales que se han ido escribiendo estén a disponibilidad de los productores, estén o no en CREA. Lo que le va a pasar a cada uno es que su realidad puede ser algo o totalemnte diferente a la de quien escribió el manual, pero eso le permite cambiar cosas en su tambo, basándose en la guía, lo cual acorta muchísimo el camino para quien empieza de cero”.
El trabajo que hace Brandi en su tambo en cuanto a la cría y recría tiene varios años, por lo tanto la mejora en cuanto a resultados entre el año anterior y este, con la disponibilidad del manual “fue relativamente pequeña”, sin embargo “nos sirvió mucho para copiar los procedimientos en otros procesos que llevamos a cabo, incluso en cuestiones administrativas. La idea de establecer procesos en las diferentes áreas de la empresa, empezamos hace un año a establecer cierto reglamento para cada sector, para entender qué se hace, sacar lo que no tiene sentido y agregar acciones”.
Uno de los ejemplos que surge de su experiencia marca la importancia de seguir ciertos procedimientos es que en los cinco tambos de la empresa el lavado de la máquina de ordeño se hacía de forma diferente en cada uno. “Cada uno ponía la cantidad de producto de limpieza que creía, con temperaturas diferentes, e incluso empleando tiempos distintos. Entonces nos dimos cuenta que la forma correcta de hacerlo era una y empezamos a corregir. En el área de reproducción también, empezamos a corregir los procesos y a dejarlo por escrito”.
Lo interesante de la iniciativa, que sirve de guía para el proceso productivo, es que no tiene relación con el tamaño de la unidad sobre la que se quiera aplicar.
“Esto es independiente de la escala. El productor tiene que estar de acuerdo en hacer las cosas de una manera. Nuestra cultura latina muchas veces nos hace improvisar, vamos haciendo camino al andar como dice la canción; y esto es hacer el camino antes de andar. Apostamos a un cambio de mentalidad, a adoptar el sistema”.
Según su experiencia, “parar y escribir los procesos no es una tarea muy larga, más aún si tenés la ayuda de alguien que escribió antes, porque ordena al productor y a toda su gente”.
Brandi entiende que este procedimiento habilita la fijación de objetivos, por lo tanto luego se dará paso a la medición de eso mismo.
“Es muy valioso a esto hacerlo todos juntos, no sólo el productor, o con el encargado, sino con todo el equipo de trabajo, para que cada uno se comprometa, se sienta partícipe, dé su opinión. Es tremendamente útil”, plantea.
Lo bueno de pertenecer
Los grupos CREA tienen la característica de compartir de alguna manera el trabajo entre pares, de aportar datos, de abrir las tranqueras, lo cual para muchos es incómodo, pero claramente genera un beneficio sobre ella experiencia de vinculares que se logra ver en los resultados, no sólo económicos de cada tambo.
“A la lechería en CREA la conforman personas que están en el negocio lechero, que están dispuestas a compartir y aprender. La gran ventaja es poder compararme con otro, ver cómo lo hace, alguien muestra cómo hace las cosas, para que los demás puedan mejorar y aprender. Somos grupos de personas que compartimos lo que hacemos para crecer”.
Quienes quieran conocer de cerca la experiencia del Tambo en Foco, pueden inscribirse de manera gratuita en esta actividad del próximo martes a través del correo info@crea.org.ar
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